Tanto Damián Cutulle como María de los Milagros Vizcarra destacaron la rápida respuesta del Ejecutivo y los trabajos de fondo en las calles de tierras del populoso barrio. “Lo único que puedo decir es que desde que entró Facundo he visto las máquinas circulando y baches históricos arreglados”, destacó el primero
Pasado el mal clima, las maquinarias municipales, coordinadas desde la Secretaria de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, volvieron al Barrio Los Naranjos para completar las tareas de entoscado, precisamente en las calles pendientes 67, 69 y entre 80 y 92.
Sin dudas, estas tareas de fondo son un gran alivio para los vecinos del sector, cansados de que cada vez que llueve sus arterias se tornan intransitables y sus casas se llenan de agua.
En ese sentido, Damián Cutulle aseveró que “tuve el agrado de estar con el Intendente (Facundo López) hace unos días y la verdad es que respondieron enseguida, y la verdad es que hacía mucho tiempo que no pasaba nada por acá y si pasaba era para repasar y no para este trabajo de fondo”.
Se esperanzó en que “ojalá que con este arreglo deje de haber tanto barro acumulado que no nos permite circular, y no se nos llene la casa de agua cada vez que llueve”.
“Lo único que puedo decir es que desde que entro Facundo, he visto las máquinas circulando y baches históricos arreglados”, cerró el vecino de calle 67.
A su turno, y en la misma línea que su vecino, María de los Milagros Vizcarra señaló que “es un gran alivio que estén arreglando las calles, porque antes esto era un charco constante y para salir había que dar toda la vuelta de manzana”.