El joven kayakista de la Escuela Municipal y la Selección, que hizo historia la semana anterior arribó este lunes de su primera gira europea del año, donde sorprendió a todo el mundo del canotaje al ser campeón en Eslovaquia. “En Europa nadie entiende cómo nosotros ganamos”, relataron junto con su papá y coach, Javier Trípano.
Este lunes por la tarde arribó a su ciudad natal el campeón del Mundo en canotaje, Manuel Trípano, quien fue recibido con honores por una caravana que lo paseó por las calles de Necochea y culminó en el municipio, donde tuvo la bienvenida por parte de un grupo de funcionarios en representación del intendente Arturo Rojas.
La hazaña del pibe de 19 años en Eslovaquia -pleno territorio visitante donde los europeos dominan el canotaje slalom- aún hace oír sus ecos a nivel nacional e internacional, y es por eso que la recepción se vivió con mucha emoción entre familiares, allegados y vecinos en general.
Al llegar al municipio, Trípano y su papá Javier -coach de la Selección Nacional- fueron recibidos por los secretarios de Gobierno, Jorge Martínez, y de Turismo y Desarrollo Productivo, Matías Sierra, acompañados por la directora de Deportes, Guadalupe Hernández, quien destacó que “han tenido un logro increíble y acá estamos para recibirlos. Esto es un trabajo de hace muchísimos años que lo vienen haciendo en familia y creemos que también es un incentivo para que los niños que vienen de abajo puedan seguirlo”.
Con una sonrisa de oreja a oreja y la medalla dorada colgada en el pecho que da testimonio de su título mundial C1 U23, Manuel Trípano expresó que “me alegraron la llegada a Necochea, adonde ya tenía muchas ganas de volver y todo esto es soñado, para poner en una película. Desde 2019 que deseaba esto y lo veía como algo muy lejano, pero nos pusimos el objetivo a mediano plazo y le queríamos meter con todo, aun con pandemia de por medio”.
Siguió rememorando en cuanto a llegar a competir al viejo continente que “en 2022 y 2023 fueron años muy lindos pero esto es impensable, hicimos que se dieran las cosas y fue todo muy hermoso”.
Acerca de su eufórica reacción cuando completó su prueba sin penalizaciones, reveló que “la sensación de correr una final del mundo es como cuando metés un gol, no sabés en el momento si ganás el partido pero hiciste el gol, así que ni bien terminé no sabía cuánto mejor lo podía haber hecho, pero sabía que podía ser suficiente parta un podio”.
No obstante, recordó que “tuve que esperar a siete competidores más que bajaran hasta que terminara la carrera y ya quedar en el podio ya era una locura”, para revelar como feliz anécdota que “fue todo una controversia porque justo en el final el último que bajó lo hizo más rápido que yo, aunque le pusieron una penalidad, solo que yo lo supe después, así que me enteré tarde que era campeón del Mundo, aunque ya estaba celebrando para entonces”.
“La cantidad de veces que me imaginé quedar en lo más alto del mundo en mi categoría fue un montón, tanto que cuando pasó me quedé anodado”, concluyó.
Por su parte, su padre y coach nacional del canotaje que depende de la Federación Argentina, Javier Trípano, se expresó emocionado al declarar que “lloro y río a la vez, estoy muy emocionado aun después de una semana. Lo que hizo Manuel en aquellas pistas es histórico”, para comparar que “nosotros entrenamos en muy lindas pistas pero con otra realidad, es como querer ganar Montecarlo o Monza en la Fórmula 1 entrenando en la Ruta 88, parece un chiste pero es así, y en Europa nadie entiende cómo nosotros ganamos. Nos veían en los entrenamientos y nos preguntaban de dónde éramos, o dónde queda Argentina, ya que son todas banderitas europeas las que llegan a la final del Mundo”.
Para seguir tratando de darle una dimensión al logro, Javier resaltó que “Manuel es el primer varón sudamericano en ganar en esta disciplina Sub 23 como campeón del Mundo, hemos hecho historia para el deporte argentino y para toda Sudamérica”, tras lo que aseguró que “la preparamos bien a la gira, ganamos la Copa Europea Italiana ni bien llegamos, salimos 8vos del Mundo en el Absoluto, ganamos esta Copa del Mundo y cuatro días después estábamos en dos finales en Polonia”.
“Debo agradecer a todo el pueblo de Necochea, al Puerto Quequén y a todos los compañeros de la Dirección de Deportes, nos sentimos muy acompañados a la distancia, estamos muy contentos de volver a la ciudad y ya nos ponemos pensar en lo que viene, que es una segunda gira con Copa del Mundo por España e Italia y con la vara muy alta porque estamos siendo observados por todos”, concluyó el mayor de los Trípano.